El más "marchoso" y deportivo de los Ford Fiesta, el ST, estrena un sofisticado motor 1.5 Ecoboost de 200 CV, unos inéditos muelles de suspensión y ofrece tres modos de conducción seleccionables… y “launch control”.

Pudieras pensar que la tercera generación del Fiesta ST no “progresa adecuadamente” por haber dado por buenos los 200 CV del anterior modelo (en concreto de la serie limitada ST200) y cuando además hace tiempo que algunos de sus rivales decidieron subir ese listón (hasta 220 CV el Renault Clio Sport); pero al margen de lo que pueda significar mantener la misma potencia, ya te adelanto que el nuevo Fiesta ST ha experimentado una evolución de arriba abajo, que lo hace mejor deportivo por prestaciones y eficacia dinámica, que es de lo que se trata.
Para empezar, esos mismos 200 CV provienen ahora de un sofisticado motor 1.5 Ecoboost de 3 cilindros que jubila al anterior 1.6 Ecoboost de 4 cilindros. Iguala potencia y también par (290 Nm), pero éste se mantiene constante en el nuevo 1.5 Ecoboost entre 1.600 y 4.000 rpm, 900 vueltas antes que el 1.6. Por muchas de sus características técnicas, el 1.5, fabricado íntegramente en aluminio, es una obra de ingeniería. Cuenta con distribución variable, combina la inyección indirecta con la directa y presenta un sistema de desconexión de cilindros, que en momentos de baja demanda de potencia, corta el suministro de gasolina y detiene el funcionamiento de las válvulas (del primer cilindro), proceso que activa y desactiva en tan solo 14 milisegundos. Prácticamente resulta imperceptible saber cuándo suceden estos episodios y Ford no ha incluido ninguna información en el cuadro de relojes que nos lo advierta.
El nuevo motor 1.5 Ecoboost resulta más compacto y ligero… y no poco emocionante. Si el tacto de giro y peculiar acústica hacen (o hacían) de menos a los bloques tricilíndricos, los ingenieros de Ford Performance han conseguido darle un carácter general muy deportivo, con muchísimo temperamento desde abajo, rabioso y constante en la estirada (corta a 6.500 rpm) y con un sonido en consonancia con el ambiente general que se respira en este Fiesta ST. Para esto último, han integrado una válvula en el circuito de escape que matiza el sonido que sale por el silencioso, dándole mucha identidad deportiva. Desde la puesta en marcha, hasta los rateos que provoca en retenciones, este nuevo 1.5 Ecoboost suena a música celestial. En general, todo lo que te llega del motor entusiasma. La caja de cambios tiene un tacto y guiados muy rigurosos, por lo que de la conducción del ST percibes un deportivo muy depurado y de mucha calidad mecánica. El nuevo Fiesta ST acelera más rápido que el anterior (6,5 segundos de 0 a 100 km/h, dos décimas menos) y homologa un consumo medio de 6,0 l/100 km (antes 6,1).
Pero el ST no es solo un nuevo motor. El chasis presenta interesantes novedades. Aunque se ofrezca en opción, el hecho de poder disponer ahora de un autoblocante mecánico sube la categoría como deportivo del Fiesta. En cualquier caso, de serie monta un control de tracción vectorial que también favorece el giro de la rueda exterior en curva, en su caso frenando la rueda interior. Ambos sistemas son compatibles y la combinación del autoblocante y el control vectorial le otorgan una motricidad y agilidad en curvas cerradas al Fiesta ST excepcional. El tren delantero es fabuloso. Tiene una enorme capacidad direccional, por la propina dirección (presenta una desmultiplicación de 12:1, la más rápida propuesta por Ford Performace en sus deportivos) , como por la aportación del autoblocante, que bajo carga de acelerador, sientes que todavía cierra más la trayectoria del ST en curva. Pero además, los ingenieros de Ford Performance han desarrollado (y patentado) unos muelles de suspensión con unas estructuras y características de elasticidad que por sí mismos otorgan también cierta direccionalidad al eje trasero. Estos muelles no son intercambiables de lado, cada lateral lleva el suyo específico y gestionan las fuerzas que reciben en curva que el neumático pise lo más plano posible (mayor adherencia) como también para inducir el giro. El eje torsional tiene una rigidez de 1.400 Nm/grad, la más firme entre los de cualquier otro modelo de Ford Performance. Con todas estas características, su conducción en tramos de montaña resulta excepcional. Ford ha hecho un conjunto muy deportivo, pero igualmente muy equilibrado, que resulta muy eficaz, como muy sencillo llevarlo realmente rápido. Pero sobre todo muy gratificante.
Por otro lado, puedes modificar el carácter del Fiesta ST, que presenta tres modos de conducción seleccionables: Normal, Deportivo y Circuito. Además de cambiar la respuesta del motor, la dirección y la acústica de escape, el control de estabilidad cambia sus parámetros para adelantar o retrasar sus aportaciones en la dinámica del coche. La nueva gestión electrónica también ha permitido desarrollar un “launch control” para gestionar con la mayor eficacia posible la máxima aceleración desde parado. El sistema se activa por medio de unos controles en el volante. Una vez activado, el sistema mantiene un régimen óptimo de revoluciones del motor y al soltar el embrague, el “launch control” posibilita la salida más rápida interviniendo sobre el control de estabilidad electrónico, el control de tracción y la entrega de par.
El nuevo Ford Fiesta ST estará disponible con tres o cinco puertas, con diseño específico y llantas de aleación de 17 pulgadas —en opción de 18 pulgadas— incluyendo también en su equipamiento de serie asientos Recaro, volante deportivo y el sistema multimedia Sync 3 con pantalla de 6,5 pulgadas —opcional de 8 pulgadas—. Entre las ayudas a la conducción puede llevar sistema de mantenimiento de carril, gestión automática de luces largas y reconocimiento de señales de tráfico.
Su comercialización es inmediata. El Fiesta ST 3 puertas tiene un precio de 24.995 euros y el de 5 puertas, 25.545 euros.